miércoles, 24 de febrero de 2010

La apuesta por el diálogo y el consenso

Mañana, jueves 25 de febrero, comienzan las primeras reuniones entre Gobierno y Partidos Politicos encaminadas a conseguir acuerdos que aceleren la recuperación económica en nuestro pais, atendiendo al ofrecimiento del Presidente del Gobierno realizado en el Congreso de los Diputados en el último debate sobre la situación económica celebrado el pasado miércoles 17.
Las causas de la situación económica en nuestro pais -hay que repetirlo una vez más- son la crisis financiera a la que lleva la codicia y la desregulación del mercado y el boom inmobiliario nacido en el Gobierno de Aznar con un cambio legislativo que al convertir toda España en un solar estimuló una especulación salvaje, y que frena el Gobierno socialista en el año 2007 modificando la norma.
El Gobierno, pues, no es el causante de la crisis, pero si lo es de paliar sus consecuencias y avivar la recuperación económica. De ahí que haya mostrado una firme y sincera voluntad para llegar acuerdos con todos, activando dos iniciativas de gran calado: la del pacto politico y la del acuerdo social.
Ambas iniciativas del Gobierno ponen de manifiesto que la recuperación económica sigue siendo su objetivo fundamental y la creación de empleo, el crédito, la reducción del déficit y la mayor competitividad de la economia española, las grandes prioridades que deben aplicarse urgentemente y que precisan diálogo y negociación con todos los Partidos, y, especialmente, con el Partido Popular.
En el tejado de la oposición está tambien la responsabilidad de empujar en la misma dirección. La utilidad de la oposición política en un pais democrático se mide en términos de responsabilidad. El Partido Popular haría mal no arrimando el hombro al tiempo que el Gobierno y el resto de Grupos Parlamentarios, pues su obsesión por restar, por negarse al mas minimo esfuerzo por el pais, le abocará a una situación contraria a la querida con esa estrategia del NO: el aislamiento político y la marginación electoral.
Este es el Gobierno del consenso y no de la imposición. Del acuerdo parlamentario y no del "decretazo". Gobernar dia a dia y, además, buscar el consenso es la tónica de un gobierno progresista que nunca renunciará a la creación de empleo, a aumentar los derechos individuales y colectivos, y a garantizar el bienestar ampliando las políticas sociales

martes, 2 de febrero de 2010

Garantizar las pensiones

Las pensiones en España hoy estan mas aseguradas que nunca. El Fondo de Pensiones cuenta con unas reservas de 60.000 M, provisionadas por el Gobierno desde el año 2004, y que se incrementarán con 2.000 M más, hasta alcanzar los 62.000 M. Si recordamos que el Gobierno del PP dejó el Fondo en 15.000 M, podemos afirmar que este Gobierno ha sido consecuente con una de sus señas de identidad más queridas: garantizar y mejorar las pensiones.

Trabajar para que el sistema de pensiones sea sostenible es responsabilidad directa de un Gobierno que quiere trasladar al futuro la buena situación actual. Responsabilidad de quien gobierna y es consciente de una realidad que casa mal con la demagogia. Esta realidad nos advierte que la esperanza de vida de los españoles es la más alta del mundo, despues de Japón. Y que los mayores de 64 años en España pasarán a ser el 32 por ciento de la población total en el año 2049, al tiempo que los menores de esa edad disminuiran en casi 6 millones.

No olvidemos que a principios del s.XX la esperanza de vida no llegaba a los cuarenta años y las previsiones para el año 2.049 apuntan a una media de 84,3 años para los hombres y 89,9 años para las mujeres. Dicho de otra manera, en el futuro habrá más pensionistas que vivirán más años y que precisan de un Gobierno consciente que debe garantizar hoy las pensiones del futuro.

La prolongación de la vida laboral de los 65 a los 67 años de forma paulatina busca este objetivo y debe hacerlo consiguiendo el máximo consenso político y social en el ámbito donde ha trasladado sus propuestas: la Mesa del Diálogo Social y la Comisión Parlamentaria del Pacto de Toledo.

Tengo la convicción que el colectivo laboral más joven, a quien van dirigidas estas medidas de
manera singular, agradecerán que agentes sociales y oposición parlamentaria estén tambien a la altura de las circunstancias y protagonicen un debate sereno y resolutivo; responsable y alejado de cualquier tentación demagógica.